Aprobada Fundación Valpuesta para poner en valor lugares de origen castellano

La Fundación Valpuesta tiene como primer proyecto la edición facsímil de los Cartularios, considerados como los textos más antiguos que se conocen con palabras en romance, conservados en la iglesia de Santa María de Valpuesta (Burgos).

Esta edición se realiza a través del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, con sede en Burgos.

Se trata de un conjunto de textos que constituyen copias de documentos, algunos escritos en el siglo X y que están considerados como los primeros con testimonios en castellano, anteriores incluso a las Glosas Emilianeses y Silenses.

La Fundación Valpuesta nace con un presupuesto de 80.000 euros y, según ha explicado en el pleno Borja Suarez, portavoz del Grupo Popular, se buscan nuevos patronos.

La intención es que la Fundación pueda financiar todos sus proyectos y buscará para ello apoyos puntuales para cada uno de los proyectos que vaya a poner en marcha.

El PSOE ha criticado que se haya tardado tanto tiempo en poner en marcha esta Fundación para poner en valor uno de los enclaves más importantes desde el punto de vista cultural, según ha explicado su portavoz, José María Jiménez.

En los últimos años la Junta de Castilla y León ha invertido 7 millones de euros en la restauración de la Colegiata de Valpuesta.

Justicia con Valpuesta

«Se ha hecho justicia con Valpuesta después de muchos años», ha valorado el presidente de la comisión de Cultura de la Diputación de Burgos, Borja Suárez, en declaraciones a El Correo. «Hace años que debería estar hecha, pero la oportunidad es esta y bienvenida sea».

«Por tanto es ahora cuanto toca poner toda la carne en el asador para potenciar un elemento patrimonial único que va a situar en el Camino de la Lengua a Valpuesta con la referencia al castellano más antigua encontrada».

Pero lo cierto es que, de momento, cuenta sólo con dos patronos: la Diputación y la UBU. «No hemos querido demorarnos más». Los demás están por llegar, aunque Suárez se muestra convencido de que no faltarán las dos cajas de ahorro de la provincia, y espera que tampoco lo hagan la UPV y la Diputación de Álava, pendientes de contestación. Muchos más estarán en el comité asesor, como la Asociación Amigos de Valpuesta o la propia entidad local menor.

Queda una cantidad ingente de trabajo por hacer pero también bastante hecho que hay que ordenar. De todo ello, la fundación será «el elemento tractor», ya se hable de asuntos lingüísticos o patrimoniales. Porque, en definitiva, «la Diputación no está haciendo otra cosa que preservar lo suyo y tratar de aprovecharlo para crear un espacio de oportunidades nuevas que generen desarrollo y empleo».

Ahí jugaría un papel importante su inclusión en el Camino de la Lengua que arranca en San Millán y concluye en Alcalá de Henares. «Es de justicia que forme parte de ese recorrido y confío en que no se tarde mucho en conseguirlo», zanjó.