Valpuesta cuenta con un fantástico patrimonio histórico y cultural que el visitante podrá disfrutar a simple vista.

El principal monumento de Valpuesta es la iglesia de Santa María, uno de los edificios religioso más importantes del norte de Burgos. Se trata de un templo realizado en sillería, representativo de la arquitectura gótica, que cuenta en su interior con un fantástico retablo del siglo XVI.

En sus orígenes, allá por el año 804, es cuando se reconstruye la vieja iglesia visigótica que había con el objeto de que ésta acoja la nueva sede episcopal e impulse con ello la repoblación y colonización del territorio, protegiéndolo de las posibles incursiones árabes. Posteriormente, en el siglo XI, la sede episcopal se traslada a su lugar de origen, la población de Oca, de modo que Valpuesta se convierte en arcedianato.

Durante estos dos siglos de prosperidad constituye un importante hito para los caminantes que buscaban los pasos seguros por estas montañas y por los peregrinos que se dirigían a Santiago.

Esta circunstancia impulsa la construcción de una nueva iglesia románica de la que apenas quedan restos.

Valpuesta supuso un importante hito para los peregrinos que se dirigían a Santiago y buscaban los pasos seguros por estas montañas.

Debido a la gran devoción popular y a la importancia y prestigio que adquiere Santa María se construye en el Siglo XIV el amplio y robusto edificio actual. En 1851, con la desamortización de Mendizabal, los clérigos abandonan el lugar y Santa María se reduce a simple parroquia.

En la plaza y calles aledañas a la iglesia se hallan otras edificaciones que denotan el esplendor que tuvo este pequeño pueblo durante la Edad Media, como el palacio-torre de los Velasco, Condestables de Castilla y algunas casas solariegas y señoriales blasonadas.